Durante muchos años me resistí a usar casco. A pesar de haber presenciado innumerables lesiones en bicicleta, algunas incluso fatales, siempre me parecieron engorrosos, incómodos y, francamente, un poco molestos. Pero a medida que la tecnología avanzó, los cascos de bicicleta se volvieron más livianos, más transpirables y mucho más cómodos de lo que jamás imaginé. Ahora, no me atrevería a andar en bicicleta sin uno, y lo mejor es que apenas noto que lo llevo puesto.
Como alguien que está profundamente arraigado en la comunidad ciclista, he escuchado muchas historias de terror, tanto de ciclistas que no usaban casco como de aquellos que sobrevivieron porque sí lo usaban. Estas historias han fortalecido mi determinación: me niego a permitir que nadie salga de mi tienda sin el casco adecuado. ¿Y cuál es el casco adecuado? En pocas palabras, es el que realmente usarás.
Cómo encontrar el casco adecuado: ajuste, comodidad y seguridad
Ajuste del casco: una experiencia personal
Los cascos vienen en una amplia variedad de formas y tamaños, y el hecho de que uno se ajuste bien en un modelo no significa que lo hará en otro. Cada marca ofrece diferentes modelos adaptados a distintas formas de cabeza, por lo que para encontrar el ajuste perfecto puede ser necesario probar varios. Un casco que se ajuste cómodamente sin puntos de presión es esencial porque un casco incómodo es uno del que te sentirás tentado a deshacerte en medio de la ruta, una elección peligrosa.
El casco debe quedar ajustado, pero no demasiado apretado. Es fundamental encontrar el punto justo en el que el casco ofrezca un ajuste seguro sin apretar la cabeza. Si queda demasiado apretado, sentirás que la cabeza se asfixia, lo que provocará incomodidad, sudoración e incluso dolores de cabeza. Una cabeza sudorosa y puntos de presión pueden convertir un gran paseo en una experiencia horrible. El casco debe permitir un poco de movimiento para que la cabeza pueda respirar, pero no tanto como para comprometer la seguridad. El casco debe moverse contigo en caso de impacto, pero no caerse, gracias a un sistema de retención correctamente ajustado.
Una regla comprobada es colocar el borde delantero del casco aproximadamente uno o dos dedos por encima de las cejas. Este es un buen punto de partida para garantizar un ajuste adecuado. Una vez que el casco esté colocado correctamente, debe ajustar el sistema de retención, que tienen la mayoría de los cascos modernos. Es una buena práctica ajustar el sistema de retención en cada viaje para garantizar un ajuste seguro, ya que un casco demasiado suelto no lo protegerá de manera efectiva en caso de accidente.
Tecnología de confort
Los cascos modernos están equipados con tecnología diseñada para mejorar la comodidad. El acolchado de espuma viscoelástica, los sistemas de retención ajustables y los diseños avanzados de correas garantizan que el casco se sienta más como una extensión de la cabeza que como un accesorio. Cuando un casco se ajusta bien, te olvidarás de que lo llevas puesto.
Correas y ajustes
Un casco bien ajustado incluye correas que son fáciles de ajustar. Un sistema de correas cómodo y ajustado garantiza que el casco se mantenga en su lugar sin causar irritación. He hecho viajes largos en los que una correa incómoda me hizo querer desabrocharla en mitad del viaje. Créame, es cuando es más probable que ocurran accidentes. Un sistema de correas seguro no es negociable.
El proceso de ajuste de las correas y el sistema de retención del casco debe realizarse siempre después de colocar el casco correctamente en la cabeza. Como se mencionó, es común aflojar el sistema de retención al final de un recorrido para mayor comodidad. Sin embargo, adquiera el hábito de volver a ajustar todo antes del próximo recorrido. Este simple paso puede marcar la diferencia tanto en comodidad como en seguridad.
Ventilación vs. Aerodinámica
La ventilación es fundamental, especialmente en recorridos largos. Un casco bien ventilado mantiene la cabeza fresca, evitando que el sudor provoque irritación. Cuanto más transpirable sea el casco, más cómodo estarás. Sin embargo, si estás persiguiendo récords o contrarreloj, la aerodinámica puede tener prioridad sobre la ventilación. En estos casos, es posible que sacrifiques algo de flujo de aire a cambio de una forma más aerodinámica.
Tecnología de seguridad
La seguridad es, por supuesto, el objetivo principal de un casco. La mayoría de los cascos modernos están equipados con tecnologías de seguridad avanzadas como MIPS (sistema de protección contra impactos multidireccionales) y tecnología esférica, diseñada para reducir las fuerzas de rotación durante un choque. Invertir en un casco con estas tecnologías es una decisión obvia: su cerebro se lo agradecerá.
En lo que respecta a los cascos KASK, existen algunas tecnologías patentadas que los distinguen. Por ejemplo, la tecnología MIT de KASK proporciona una mayor protección mediante el uso de una capa de policarbonato que cubre la parte superior, la base y la parte posterior de la carcasa, lo que mejora la resistencia a los impactos. La prueba WG11 es otra característica fundamental de los cascos KASK, que evalúa la protección contra impactos rotatorios para garantizar los más altos estándares de seguridad.
Cascos específicos para cada género
Existe la idea errónea de que los cascos son específicos para cada género, pero la realidad es que no existe un casco "masculino". Los cascos específicos para mujeres suelen diferir solo en el color o la disponibilidad de tallas, y las tallas más pequeñas suelen comercializarse para mujeres. Lo importante es encontrar un casco que se ajuste cómodamente a tu cabeza, independientemente de su publicidad.